Traducción de Pravda.ru, 21-02-2013: “X-Files of Soviet Defense Ministry exposed” en http://english.pravda.ru/society/anomal/21-02-2013/123859-x_files_soviet_defense-0/
Los Rusos y los Extraterrestres
En un día normal de invierno en Moscú, en la comodidad de una sala con hoguera y chimenea, los periodistas recibieron noticias sensacionales. Alexey Savín, oficial retirado de alto grado del ministerio de Defensa, teniente general en la reserva, con grado de Doctor, miembro de la Academia de Ciencias Naturales, dijo que a finales de la década de 1980 un grupo de investigadores de la Unidad de Gestión Experta del Comando General había logrado hacer contacto con representantes de otra civilización. Curiosamente, ninguno de los periodistas estuvo particularmente sorprendido sino, más bien, aliviado con la «confesión».
Vasili Yeremenko, un Comandante General en situación de reserva, miembro de la Academia de Seguridad, Defensa y Aplicación de la Ley, fue el primero en hablar a la prensa. En los tiempos de la Unión Soviética trabajó en la KGB y en la supervisión de la fuerza aérea y en el desarrollo de tecnología de aviación. Entre sus tareas estuvo la recopilación de información por la fuerza aérea sobre la aparición de objetos voladores no identificados. Según Vasily Yeremenko, en aquella época había cantidad abundante de dicha información.
Incluso se dio a las unidades de cohetes antiaéreos una directiva para el caso de detección de ovnis. El principal cometido era evitar situaciones de agresión recíproca. En 1983-1984, en los campos de pruebas de la Academia de Ciencias en Vladimirovka, el ministerio de Defensa y la KGB organizaron un estudio a gran escala de fenómenos paranormales. No fue por azar que se eligiera un lugar de entrenamiento militar. Hace mucho tiempo que los expertos han llegado a la conclusión de que los ovnis aparecen inevitablemente en lugares donde se prueban equipos militares y armas.
«Podemos decir que aprendimos a convocar ovnis en Vladimirovka. Para ello, aumentamos notoriamente el número de vuelos militares y movimiento de equipo. Si intensificábamos la actividad, los ovnis aparecían con probabilidad de ciento por ciento”, explicó Yeremenko. Tras seis meses de pruebas la Comisión autorizada llegó a tres conclusiones principales.
Primera: la ciencia moderna no era todavía capaz de identificar tales fenómenos. Segunda: los ovnis podrían ser vehículos de reconocimiento de los Estados Unidos o Japón. Tercera: podría ser una civilización extraterrestre. «El tema UFO hoy es omnipresente. Precisamente por la gran publicidad que concitan, los científicos serios no están dispuestos a expresar su opinión sobre este asunto. Los pilotos a menudo ven estos objetos, pero tienen un veto sobre este tema, y de igual manera los astronautas. En conversaciones confidenciales narran sus experiencias con ovnis, pero tienen miedo de hablar públicamente sobre esto”, dijo Vasily Yeremenko.
Él cree que este tema requiere un planteamiento serio porque es un problema de seguridad. Sin embargo, todavía es un asunto cerrado o reservado, tanto en Rusia como en los Estados Unidos. El teniente general Alexey Savín procedió a revelar algunos aspectos de la actuación del ministerio de Defensa en esta temática. Él dirigió la Unidad de Gestión Experta del Comando General, cuya tarea era examinar diversos fenómenos extraños o inexplicables.
El principal proyecto de la unidad fue un programa estatal sobre el descubrimiento de recursos humanos intelectuales. El objetivo del programa era identificar maneras de hacer que el cerebro humano funcione en un régimen o modalidad especial de superpoderes, que convierte a una persona en superhumano. El Consejo científico del programa estaba dirigido por la académica Natalya Bekhtereva, quien hasta su muerte tuvo el cargo de directora científica del Instituto del Cerebro Humano de la Academia de Ciencias de Rusia.
Más de doscientos profesionales altamente calificados de todo el país participaron en el programa. «En el proceso de investigación, llegamos a la conclusión de que un ser humano es un sistema de energía e información que recibe la información desde fuera. Esta es precisamente la razón por la que un ser humano puede manifestar habilidades paranormales”, dijo Alexey Savín. Con el fin de identificar esta fuente externa de información, se crearon tres grupos. Un grupo de científicos, otro de militares, y el tercero estaba compuesto por mujeres.
En la investigación el grupo de mujeres mostró los progresos más significativos. Savín explicó que «queríamos hacer contacto con representantes de otras civilizaciones. Y lo hicimos». Según él, se desarrolló un método especial que permite al cerebro humano sintonizarse para un contacto de este tipo. «Tuvimos que sintonizar el contorno de energía del cerebro humano en una frecuencia particular, como un radio,» explicó Alexey Savín.
En el transcurso de la experiencia no se recurrió a hipnosis, drogas u otros métodos similares. Se elaboró también un sistema especial de pruebas para diferenciar los informes que fuesen producto de alucinaciones o locura de los participantes en el experimento. Los resultados experimentales fueron impresionantes: seis participantes tuvieron oportunidad de contacto físico, y dos de ellos incluso se las arreglaron para visitar una nave alienígena. Según Savín, los representantes de civilizaciones extraterrestres se revelaron poco a poco, proporcionando información según consideraban apropiado.
En particular, hablaron sobre su sistema de educación y estructura de gobierno. No se pudo obtener ninguna información de utilidad militar. Lo único que acordaron compartir era un esquema de equipos para el diagnóstico y tratamiento de diversas enfermedades. El responsable del experimento explicó que los humanos somos para ellos como niños pequeños. «Nuestra civilización es demasiado joven para que les interese como tema de diálogo. Porque también somos parte del universo, nos podemos dañar nosotros mismos y a otras civilizaciones con nuestras acciones insensatas; por eso nos observan».
El programa de comunicación con inteligencia extraterrestre había sido desarrollado durante varios años hasta que intervino la política. En 1993, se interrumpió el estudio, y se disolvió la unidad. Según Savín, él pudo mantener sólo un pequeño número de documentos; la mayoría de los cuales, incluyendo fotografías, está todavía en los archivos del ministerio de Defensa. Por cierto, este método único para el desarrollo de las capacidades de un individuo se usó hasta hace poco en la Academia que lleva el nombre de Yuri Gagarin, hasta que la disolvió el exministro de Defensa [Anatoly] Serdyukov**. Sin embargo, se preservó el núcleo del equipo de investigación.
«Hace cuatro años intentamos repetir el experimento, y tuvimos éxito”, dijo Alexey Savín. Según él, hoy este trabajo continúa, y “los cerebros y talentos están presentes todavía en la industria de defensa». Respondiendo a la pregunta de Pravda.Ru de por qué se decidió a anunciarlo a los medios de comunicación, Savín respondió: «¿Por qué esconderle algo a la gente? Más bien necesitan prepararse para nuevos retos».
Cree que hoy existen dos desafíos: el cambio climático y la escasez de agua. Rusia tiene un papel especial en este proceso. «Cuando pasemos la encrucijada o punto crítico, gente de todas partes vendrá corriendo a nosotros. ¿Cómo la recibiremos, con armas? Por supuesto, tendremos que negociar”. Tal vez todo esto sea un rompecabezas del «libro de texto» para jóvenes civilizaciones como la nuestra. Quizá los extraterrestres han preparado un experimento para ver cómo lo enfrentamos.
En los tiempos de la Unión Soviética, el ministerio de Defensa estaba trabajando en un proyecto secreto encaminado a crear un superhumano con habilidades paranormales. En el marco de este programa, un grupo de científicos logró ponerse en contacto con una civilización extraterrestre. El jefe de este proyecto de máximo secreto compartió por primera vez algunos detalles con los reporteros.